D. MIGUEL MARTÍN VEGA
PREGÓN - SEMANA SANTA 2012 - VILLAFÁFILA
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D. MIGUEL MARTÍN VEGA PREGÓN - SEMANA SANTA 2012 - VILLAFÁFILA |
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Gracias Elías por tus palabras. Mi agradecimiento por ellas presento. Que año tras año lo hagas, se lo merece este pueblo.
El pensar hace vivir. El interpretar da vida. Así yo lo quiero sentir, con vosotros en este día.
PREGÓN DE SEMANA SANTA
RECUERDO
Para expresar los sentimientos dadle al poeta el verso. Permitidme unos momentos y así yo lograrlo quiero.
Lucha encarnizada tengo entre el Recuerdo hecho presente y el otro llamado Olvido, al que quiero tener ausente.
OLVIDO Sí, me llaman El Olvido y aquí presente me tienes, pegadito a tu oído para que nada recuerdes.
REC. Dar el pregón se me ofrece, negarme a ello no puedo, pues es a toda la gente que yo en este pueblo quiero.
Dos partes el mismo tiene; Una, trayectoria de mi vida. Otra, la Semana Santa presente que este pueblo recuerda y no olvida.
Villafáfila, pueblo querido paraíso de mi corta infancia, lugar de cebada y trigo donde reinaba silencio y calma.
Infancia tranquila y sana llena de juegos ,esfuerzo y trabajo. Canicas, aros, chapas , rana… todos ellos que practiqué tanto.
Anécdotas no han faltado por las calles de este pueblo, que aunque llenas de barro yo aquí algunas recuerdo.
Jacoba el comercio tenía, barras de membrillo en el escaparate estaban. El cristal con cuidado se le movía y en el pozo de ramos nos alimentaban+
OLV. Qué bien que no te acuerdes de las pifias en la vía del tren hechas, y de otras muchas cosas ausentes que no quiero recuerdes en estas fechas.
REC. Qué poco me conoces Olvido, pues de ello ahora precisamente, en este momento tranquilo quiero contar a esta gente.
Cruce de cuatro calles, El Rojo por el futbolín cobraba. Amigos en partidas interminables con monedas por el tren aplastadas.
Qué rabia y cabreo cogía cuando en la recaudación encontraba, las pocas monedas que había todas ellas perra chicas falsificadas.
Las comadres, fiestas tan deseadas por las jóvenes y mayores, que todas ilusionadas, las orejas, cocinaban en los fogones.
Con montón de llaves entrando esperando las orejas encontrar, aquellas que ellas cantando acababan de cocinar.
¡Qué sorpresa! , ¡qué dolor! , al comprobar que allí solo había, el dulce y sabroso olor que de ellas permanecía.
Monaguillo siempre fui por Don Camilo elegido. Mucho vino le bebí, sin que él lo hubiera sabido.
Don Fernando y Don Tarsilo, maestros de mi primera enseñanza. Gracias por el bien que me hicieron, aunque mucho les di la lata.
OLV ¿Y en Villarrín el examen realizado? ¿Acaso no es ésta, entre otras, la razón fuera de que pasado el año con los Salesianos partieras?
REC. Razón tienes Olvido pero deja que mi relato siga, pues si sigo hablando contigo, no termino en todo el día.
Celanoba, Allariz y Cambados. Internados de estudio, patio y vida. Cinco años bien ganados, en estudio, formación y alegría.
Fútbol, zarzuelas, teatro en todo participaba, pasando muy bien el rato mientras los años pasaban.
A Astudillo, Palencia , me mandaron para hacer el Noviciado. Pruebas , estudio y, rosarios… todo ello para lograr el Hábito. + Con la sotana en el cuerpo, en Medina la Filosofía me esperaba. Tres años de estudio, rezo y juego, allí la flor de mi vida pasaba.
Allariz, Orense, lugar de mi primera enseñanza formador de salesianos en potencia. En ello puse toda mi alma, y así hacer realidad su presencia.
OLV. ¡Cuántas cosas te dejas en el tintero! Ellas me alimentan día a día, enfrentándome a ti, Recuerdo, que ni oírte, ni verte querría.
REC. Libros escribir yo puedo, pero no es la hora ni el instante, que de ellas hablar yo luego, podré en mi vida restante.
Adiós Galicia querida, tierra donde eu crieime. Campamentos dirigidos algún día, alegría repartida entre la gente.
Salamanca, Teologado presente. Tres años de oración y estudio profundo. Emociones, sentimientos siempre en mi mente, con la ilusión del Sacerdocio a punto.
Villafáfila fue el lugar de mi primera misa cantada. Nunca lo podré olvidar, pues era una meta soñada.
Sólo pasaban dos días, a Don Camilo la apuesta ganaba, si allí a confesar me atrevía con esta corbata encarnada.
La Vega, Salamanca, club de jóvenes amados, receptores de mis palabras y consejos. Recuerdo de sábados y domingos pasados con mi presencia siempre entre ellos.
OLV. Gracias, Recuerdo, por tu olvido repentino. ¿Y el fútbol? ¿Nueve jugador nato?, temido siempre por el Salmantino, al que ganaste tanto?
REC. Déjame Olvido llegar a mi Madrid dorado. Licenciatura meta a conseguir soñada. Dieciocho tandas de ejercicios he dado, dos años de labor sacerdotal practicada-
Madrid, La Coruña, Vigo, Cuenca, León… En sus jóvenes mi palabra dejaba, esperando que algún día en su corazón la semilla de mis consejos brotara.
Mi barco distinto rumbo tomó. Con ilusión al colegio volvía. La enseñanza a mi mente llegó, y así comenzar nueva vida.
Boda de amigos había, jardín de flores brotaba. La flor que más florecía, allí mi Rosa encontraba.
Dos pétalos la flor tenía, la Rosa que allí alegre cogí. Los hijos que más quería , de Ella con cariño los recibí.
OLV. ¿Quieres dejar de una vez, hablar de tu vida privada? Pues todos querrán saber, lo que en el colegio pasaba.
REC. Treinta y cinco años he pasado repartiendo a los jóvenes sabiduría. Inglés , Francés y Lengua he dado, las asignaturas que yo impartía.
Puntualidad fue mi lema, disciplina mi consigna. Los disgustos y penas no impidieron conseguirla.
Chicos, buenos ,regulares, inaguantables, muletillas a montones, ninguno somos iguales pero algo queda en sus corazones.
Alumnos que por allí pasaron, muchos recuerdos tenemos Siempre los recordamos, cuando por la calle nos vemos.
OLV. No quieras, Recuerdo, hacer presente a aquellos que te encontraste, no sea que por algunos dejar ausente, yo tenga que ir al rescate.
REC. Veladas, olimpíadas, misas, teatro, ¡Qué momentos de alegría! Nunca olvidaré esos ratos y en mi corazón María.
Thank you , Merci, Gracias, Palabras usadas por mí a menudo. En el corazón las llevo grabadas, hoy os las doy a cada uno.
Así termina mi vida a grandes rasgos y en verso. A todos, en este día con satisfacción os la ofrezco.
SEMANA SANTA
Semana Santa, tan recordada y vivida. Segunda parte de mi pregón presento, esperando que en este día a todos os deje contentos.
Muchos son los pasos que en esta iglesia se encuentran, esperando siempre los brazos que nos brinden su presencia.
A todos palabras tener yo quiero, y con ellas hacer presente el vivo y grande respeto, que aquí le tiene la gente.
PROCESIONES
El silencio
Miércoles, De la iglesia Jesús ha salido a brazos la imagen avanza, oyéndose sólo el ruido de Romanín la Matraca.
En la oscuridad sobresale la imagen iluminada, rodeada por la calle de túnicas verdes y blancas.
Delante van los niños, detrás sus padres al cristo alzan. Creced pronto os pedimos que las fuerzas ya nos fallan.
A la plaza llegan luego, allí, el cristo se para, para escuchar del pueblo su sincera plegaria.
Rudas voces se alzan cantando el Miserere. Esperando del cristo la gracia y el perdón que se merecen.
Penitencia
De Penitencia la llaman y EL Ecce Homo es el centro. La procesión que es más larga por las calles de este pueblo.
Jesús, aclamado, triunfante, de la multitud bien recibido, por la misma que al instante será coronado, azotado y herido.
Versos de mi abuela tengo al Jesús que así sufría, Con gran emoción los recuerdo, Por la pasión que en ellos ponía.
“Por aquí pasó señora a la cantada del gallo Unos le iban escupiendo, otros le iban desgarrando y el más pequeñito de ellos bofetadas le iba dando”.
Es tan grande mi fe en ella la que a esta imagen profeso, que prefiero que de otros sean los versos que aquí os ofrezco.
“EL JUEZ MÁS LISONJERO QUE A SU PRINCIPE LO HA SIDO POR INTERÉS DE SU GRACIA, Y POR NO PERDER SU OFICIO EN UN BALCÓN DE SU CASA, AZOTADO ESCUPIDO, PARA QUE EL PUEBLO LE VEA, PUSO AL INOCENTE CRISTO ”.
De l La Vera Cruz
Ermita de la Vera Cruz recuerdo. La noche sigue y avanza camino del cementerio la procesión va con calma.
Dos filas los penitentes marcan llevando la antorcha consigo. Luciendo sus largas capas que adornan y quitan el frío.
Orgullosas las madres al Cristo rodean contemplando sus labores, capas que al viento ondean fruto de sus muchos sudores.
El Encuentro
Siete palabras de amor dijo Jesús angustiado. En ellas se expresa el dolor de Cristo crucificado.
Escena de Viernes Santo. Todos de pie en la plaza al alba, para contemplar con encanto a Jesús y su Madre santa.
Noche de juerga y limonada. Ventura, José Luis, Pepe, Julián, Isidro, entre otros, a San Juan llevaban bajo los efectos del sueño y vino.
La plaza de gente rebosaba ¡Corre Juan a ver a María! Con voz potente del balcón sonaba y a los pocos pasos San Juan caía.
¡Qué miedo! ¡qué tormento! En Don Camilo pensaban cuando pasado un momento las túnicas le entregaran.
La procesión la esquina de San Juan doblaba. A los pocos pasos se para al oír una voz grave y rota que sale de una ventana.
Con voz cascada y sin freno las palabras en forma de saeta salen. Dirigiendo a Jesús Nazareno, las plegarias que su corazón invaden
Los pies descalzos las piedras sienten. Su andar es lento en la calle. Promesas de penitentes, que algún día hicieron por alguien.
El reto está cumplido. La ofrenda satisfecha. El camino han recorrido Jesús, tu sabes por quién era.
OLV. Qué bien me lo estoy pasando Interrumpir yo no quiero. Muchas cosas vas dejando como siempre en el tintero.
REC. ¡Ay Olvido! Qué insolente. ¿No ves que lo que yo digo es lo que quiere la gente, y por eso de ti me olvido?
Santo Entierro
Tarde de viernes Santo, tres pasos salen en calma. Por las calles se oye el canto de la gente que acompaña.
La Urna
Terminó por fin el gran Calvario, la voz ha enmudecido en su garganta. Pronto comenzará su gran reinado el Hijo de Dios en paz descansa.
Ahí va Jesús ya muerto, preciosa imagen tallada. Objeto de alguna broma en otros tiempos realizada.
Urna del san entierro, nadie por su peso llevarla quería. Piedras que debajo del cuerpo alguno por broma ponía.
Las Angustias
Angustias, expresión de dolor y llanto al ver a Jesús ya muerto , amparado en su regazo sin que nadie pueda evitar lo hecho.
Con tus brazos lo sostienes y en tu regazo lo amparas. Madre mía cuanto lo quieres al hijo de tus entrañas.
La tristeza y la amargura se reflejan en tu cara, los hombres con su locura han traspasado tu alma.
La Dolorosa
Medalla de plata y cordón amarillo cuelgan de su cuello y cintura, cual luciérnagas muestran su brillo en la noche tan oscura.
El manto cubre su rostro, en su cara se refleja el llanto. Las lágrimas poco a poco por sus mejillas van resbalando.
Qué bonita es la saeta que otros nos han dejado. Disfrutad de su belleza con esta intención lo hago
“Lágrimas derrama el cielo la noche del Viernes Santo, y tu madre mía de los Dolores las escondes bajo tu manto.
Qué tristeza y dolor muestras en tu pálida cara. Lacerada de dolor llevas tu alma encerrada “. La Soledad
La Virgen lenta camina, el silencio acompaña al aire las velas la noche iluminan con su llama flameante.
¡Qué procesión tan bonita! ¡Cómo brillan las calles! Las mujeres van solitas sin que el farolillo se apague.
OLV. ¡Basta ya! Que oírte más no quiero. Tanto recuerdo me aplasta. Dejar algo en olvido es bueno que pronto vendrá la subasta.
REC. Déjame que esto diga tu reprimenda acepto, porque a esta gente querida si no se lo digo reviento.
Jóvenes que su trabajo dejan recorriendo larga distancia, para que llevar su paso puedan. ¡Esto es Semana Santa!
Madres que preparáis vuestras velas con ilusión y con gana, acompañando a la virgen con ellas. ¡Esto es Semana Santa!
Hombres que vuestro trabajo apremiáis para llevar vuestra imagen santa, así vuestras promesas lográis. ¡Esto es Semana Santa!
Jóvenes que me escucháis nunca olvidéis estos días. Junto a vuestros mayores estáis Dadles siempre esta alegría.
Que la Semana Santa no muera. Que vuestra ilusión no se acabe. Que vuestro brazo se ofrezca, y la vivamos por la calle.
Este es el recuerdo que os dejo en esta semana santa. Llevarla en el corazón os deseo y vámonos que espera la subasta.
1 de Abril de 2012, Villafáfila Miguel Martín Vega.
Autor: José Luis Domínguez Martínez.
Texto: D. Miguel Martín Vega. Pregonero de la Semana Santa 2012.
Fotografía: José Luis Domínguez Martínez.
Transcripción y montaje: José Luis Domínguez Martínez.
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